
ELECCIÓN DE CORTES: SABOR A POCO
Una justicia pronta, cumplida e independiente necesita de una institucionalidad eficaz, lamentablemente ausente en el recientemente concluido proceso de elcción de cortes. Aqué se proponen algunas soluciones para un sistema judicial independiente, que no es solo un requisito para el correcto funcionamiento de la democracia, sino una condición indispensable para el desarrollo económico y social de la Nación.
LAS PRIORIDADES DEL GOBIERNO EN 2025
El proyecto de presupuesto 2025 presentado por el Ejecutivo de Guatemala al Congreso refleja un incremento significativo, el mayor en 15 años, y plantea un déficit fiscal sin precedentes. A pesar de las deficiencias institucionales existentes, el gobierno muestra confianza en ejecutar un mayor gasto de manera eficiente. Aunque solo tiene disponible el 18% de sus ingresos para políticas públicas, las prioridades presupuestarias incluyen la educación, con un enfoque en salarios y relaciones sindicales, así como la infraestructura a través del Ministerio de Comunicaciones. Sin embargo, el presupuesto carece de énfasis en temas como la seguridad social y la transparencia, lo que sugiere una intención de asegurar la gobernabilidad política mediante el reparto de recursos a municipalidades y consejos de desarrollo.

REGALAR DINERO PÚBLICO: EL RECURSO FÁCIL
La columna critica la proliferación de iniciativas legislativas que, sin estudios de impacto fiscal y macroeconómico, comprometen la estabilidad económica de Guatemala. Ejemplos incluyen la condonación de deudas de empresas municipales con el INDE, la eliminación del Impuesto de Solidaridad y el aumento a las pensiones de jubilados, decisiones que aumentarían el gasto público en miles de millones de quetzales. Estas medidas, aunque populares, son insostenibles a largo plazo, generan déficit fiscal y distorsiones económicas. Se propone implementar reglas que obliguen a evaluar el impacto fiscal de las leyes para evitar decisiones impulsivas.

AMPLIACIÓN PRESUPUESTARIA: LO BUENO, LO MALO Y LO FEO
Dividida en tres aspectos clave —los puntos macroeconómicos positivos, las carencias en transparencia y calidad del gasto público, y las preocupantes implicaciones políticas—, la columna examina cómo, a pesar de sus sólidos fundamentos macroeconómicos, esta ampliación presupuestaria podría estar amenazada por problemas de transparencia y riesgos políticos, afectando así la confianza en la gestión fiscal del país.

UNA AGENDA LEGISLATIVA PARA EL DESARROLLO
El reciente incremento del Presupuesto del Estado para 2024 demuestra la capacidad de alcanzar mayorías parlamentarias, incluso en un ambiente legislativo fragmentado. Se presenta una oportunidad clave para impulsar una agenda legislativa con visión a largo plazo, orientada a reformas pro-crecimiento y sostenibles.

INFRAESTRUCTURA PÚBLICA: LOS DESAFÍOS POR DELANTE
Para mejorar la infraestructura pública en Guatemala, es crucial implementar cambios administrativos y regulatorios que promuevan la transparencia y efectividad en la ejecución de obras. Una legislación moderna y adaptada puede acelerar el desarrollo vial y económico del país, priorizando la planificación, continuidad y supervisión de proyectos, además de fomentar la competencia en la contratación. Los líderes políticos deben actuar con visión para reformar el marco institucional y aprovechar los recursos disponibles eficientemente.

¿ES VIABLE LA READECUACIÓN DEL PRESUPUESTO 2024?
HABRÍA QUE EVITAR SEGUIR HACIENDO MÁS DE LO MISMO

ENERGÍA ELÉCTRICA: SE ACABARON LAS VACAS GORDAS
URGEN MEDIDAS PARA EVITAR UN DÉFICIT DE SUMINISTRO

BALANCE DE LA ECONOMÍA EN 2023 Y DESAFÍOS PARA 2024
En 2023, Guatemala mantuvo estabilidad macroeconómica con un crecimiento del PIB del 3.3%, baja deuda pública, déficit fiscal, y un tipo de cambio estable, pese a una inflación del 3.5% y la incertidumbre electoral. Las exportaciones e importaciones cayeron por la desaceleración global, pero se espera una recuperación en 2024. Los retos incluyen mantener esta estabilidad, mejorar el clima de negocios, fortalecer instituciones y servicios públicos, y atraer inversiones mediante certeza jurídica y un entorno político estable.

LAS INSTITUCIONES DEL 44
Las reformas de la Revolución de 1944 en Guatemala crearon instituciones autónomas clave como la Universidad de San Carlos, el Banco de Guatemala y el IGSS, diseñadas para operar sin interferencias políticas y modernizar el país. A pesar de enfrentar desafíos similares a los de 1944, estas instituciones han demostrado su eficacia y estabilidad gracias a su autonomía y diseño inclusivo. Es crucial mantener un equilibrio en su gobernanza para evitar la captura regulatoria y garantizar la representación de diversos sectores.

ELECCIONES Y RIESGO-PAÍS
Las elecciones en Guatemala, aunque demostraron la solidez del sistema democrático, revelaron debilidades en la gobernanza debido a la judicialización del proceso electoral. Esto genera incertidumbre que afecta negativamente la calificación de riesgo-país. A pesar de políticas macroeconómicas estables, Fitch Ratings destaca problemas de corrupción y estado de derecho como obstáculos para mejorar la calificación soberana, impactando la confianza financiera internacional y aumentando los riesgos crediticios.

PRIMERA VUELTA ELECTORAL: 5 PARADOJAS Y 5 LECCIONES
La primera vuelta electoral se desarrolló pacífica, transparente y legítimamente, pero sus resultados aún no se oficializan. De ella surgen varias paradojas, pero también varias lecciones a aprender para no volver a cometer los mismos errores en el futuro

IMPUESTOS: REFORMA INTEGRAL O PARCHE
Resumen profesional:
Guatemala posee uno de los aparatos estatales más pequeños del mundo en relación con el tamaño de su economía, lo que repercute en una provisión históricamente deficiente de servicios públicos. Ante la necesidad de fortalecer al Estado, la vía más sostenible es una reforma fiscal integral, pero las recientes propuestas del gobierno resultan tímidas y parciales. Pese a una coyuntura favorable —con presión ciudadana, apertura empresarial y respaldo internacional—, la falta de ambición amenaza con repetir errores del pasado. Una reforma gradual, pactada y estructural aún sería posible, si se priorizan medidas anticorrupción, racionalización del gasto y fortalecimiento institucional. De lo contrario, el país volverá a desperdiciar una oportunidad histórica.

REFORMA ELECTORAL DE FONDO
En lugar de debatir propuestas polémicas que dificultan consensos, la reforma a la Ley Electoral debe enfocarse en resolver los problemas estructurales del sistema político guatemalteco: la fragilidad institucional de los partidos, la falta de representatividad de los funcionarios electos y la debilidad del Tribunal Supremo Electoral. Propuestas como listas semiabiertas, fortalecimiento de los partidos desde dentro y mayor independencia del TSE son esenciales para construir una democracia más sólida.

¿QUEREMOS MÁS -O MENOS- MINISTERIOS?
La estructura del Organismo Ejecutivo refleja las prioridades del gobierno, y el debate sobre la creación de nuevos ministerios en Guatemala plantea una disyuntiva clave: ampliar las carteras para atender áreas específicas o mantener una estructura más compacta y eficiente. Aunque algunos proponen dividir ministerios actuales o replicar modelos de otros países, cualquier cambio debe basarse en un análisis integral que considere recursos limitados y objetivos concretos. La eficiencia gubernamental no se mide por cantidad de ministerios, sino por su organización y capacidad operativa.

LA USAC DEBE RENDIR CUENTAS
A pesar de recibir un presupuesto millonario sostenido por los impuestos de todos los guatemaltecos, la Universidad de San Carlos evita conectarse a los sistemas oficiales de control financiero del Estado y no publica información básica sobre su gestión. Mientras solicita nuevos préstamos que incrementarán la deuda pública, se niega a rendir cuentas, en contraste con modelos como el de la UNAM. Su falta de transparencia exige una reforma urgente para cumplir con su responsabilidad ante la ciudadanía.

CLAMOR POR UNA AGENDA
El primer semestre del nuevo gobierno se ha caracterizado por una gestión sin prioridades claras, generando críticas por la falta de rumbo frente a una creciente incertidumbre política y económica. Mientras indicadores económicos reflejan una desaceleración atribuida a factores estructurales y globales, también pesa la inestabilidad interna derivada de la lucha contra la corrupción. Aunque existen propuestas desde distintas áreas del Ejecutivo, aún falta enfoque y ejecución. Se propone una agenda concreta que incluya seguridad, justicia, lucha contra la corrupción, combate a la desnutrición y una política económica activa, como vía para recuperar confianza y dinamismo.

LA INNOVACIÓN
Para lograr un crecimiento económico más sólido y duradero, Guatemala necesita fomentar la innovación empresarial y facilitar el emprendimiento. Esto implica mayor inversión en investigación y desarrollo, un entorno regulatorio que estimule la competencia y la protección de la propiedad intelectual, y políticas públicas que fortalezcan el clima de negocios.

EL CONSUMIDOR ES LA CLAVE
El consumo privado es el motor central de la economía guatemalteca, y su fortalecimiento es clave para crecer más allá del ritmo inercial. Para lograrlo, se requiere identificar con precisión a los consumidores, tanto locales como internacionales, mejorar su capacidad de compra y aprovechar el auge de la tecnología digital para conectar con ellos de forma más eficiente.

EL IMPERATIVO DEL CRECIMIENTO ECONÓMICO
Acelerar el crecimiento del PIB debe ser prioridad si se quiere generar empleos formales, aumentar ingresos públicos y reducir desigualdades. Sin rebasar el techo del 4%, Guatemala seguirá estancada. Para lograrlo, se necesita una política económica integral que combine reformas institucionales con medidas macroeconómicas que favorezcan la inversión y el dinamismo empresarial.