
¡CÓMO ES CRUEL LA INCERTIDUMBRE!
El aumento acelerado de contagios y la falta de información confiable impiden prever el fin de la crisis sanitaria y agravan la incertidumbre económica. Los programas de ayuda llegan de forma limitada y el consumo sigue restringido por miedo, desempleo y confinamiento. La clave para superar el temor radica en reforzar la capacidad de pruebas, rastreo y aislamiento, estrategia probada en países con menos recursos. Paralelamente, es imprescindible un plan integral de reactivación acompañado de comunicación clara y líderes confiables. Sin confianza ciudadana y empresarial no habrá inversión ni gasto suficiente para iniciar una verdadera recuperación hacia la nueva normalidad.