
EL DESENCANTO CON EL CAPITALISMO
El creciente desencanto con el capitalismo y la globalización refleja una percepción generalizada de que los beneficios del sistema actual están mal distribuidos, generando tensiones sociales y alimentando el ascenso de líderes nacionalistas y proteccionistas. Aunque la globalización ha contribuido a reducir la pobreza global y mejorar los estándares de vida, también ha tenido efectos colaterales negativos que exigen una intervención estatal estratégica. Los gobiernos deben proteger a los trabajadores sin sacrificar la integración económica, mientras que las empresas deben adoptar una visión sostenible de largo plazo que armonice rentabilidad y bienestar social.

PROSPERIDAD Y GLOBALIZACIÓN
Aunque ideológicamente cuestionados, el capitalismo y la globalización han sido responsables de enormes avances materiales y sociales. Han impulsado el crecimiento económico, mejorado derechos humanos e igualado oportunidades entre países. Sin embargo, persisten desafíos como el aumento de la desigualdad interna, especialmente en países pobres. La clave está en diseñar mecanismos que incluyan a los más rezagados, sin sacrificar la innovación ni los beneficios del libre mercado.