
EL DESAFÍO DEL DESEMPLEO
La Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos del INE revela un panorama preocupante: aunque el desempleo abierto es bajo, el subempleo afecta a más de 3 millones de guatemaltecos que trabajan en condiciones precarias e informales. La escasa cobertura de seguridad social, el desempleo juvenil desproporcionado y el bajo nivel educativo de la fuerza laboral dificultan la atracción de inversiones y frenan el crecimiento. La situación es más crítica en las zonas rurales, donde la baja productividad agrícola agrava la pobreza. Guatemala necesita con urgencia políticas económicas sostenidas y estratégicas que impulsen el empleo formal y eleven la calidad del capital humano.

RECUPERACIÓN: ¿SIN EMPLEOS?
Mientras la economía mundial, liderada por EE. UU., muestra señales de leve recuperación tras la crisis, la sostenibilidad de este crecimiento está estrechamente ligada a la creación de empleo. En Guatemala, a pesar de algunos indicadores positivos del PIB, no se cuenta con datos actualizados sobre el desempleo. Esta ausencia de estadísticas impide diseñar políticas efectivas que aseguren un crecimiento con inclusión laboral. La falta de compromiso del INE con la generación sistemática de estos datos representa una debilidad estructural que limita las posibilidades de una recuperación económica sólida y sostenible.

ORFANDAD ESTADÍSTICA
La reducción del presupuesto del INE podría afectar la calidad y cobertura de encuestas clave, debilitando la capacidad del gobierno para diseñar políticas públicas eficientes. Es esencial fortalecer el sistema estadístico nacional, garantizar su autonomía y evitar interferencias políticas que distorsionen los datos oficiales.