¿NOS IMITAN EN COREA?
11/agosto/2008
LOS BANCOS CENTRALES EN VÁRIOS PAÍSES ENFRENTAN DILEMAS SIMILARES AL AUMENTAR LAS TASAS DE INTERÉS
El 23 de julio la Junta Monetaria decidió (con votación dividida) aumentar la tasa de interés líder en 0.50% hasta ubicarla en 7.25%. Del otro lado del mundo, el 7 de agosto, el Banco de Corea elevó su tasa de interés de 5% a 5.25% en una decisión que, de acuerdo con reportes de prensa, resultó difícil de adoptar. ¿Está acaso el Banco de Corea siguiendo el ejemplo del Banguat? Evidentemente sería pretensioso creer que los jerarcas del banco central surcoreano prestan atención a lo que ocurre en nuestro país; sin embargo, resulta ilustrativo analizar qué están haciendo en otros países y evaluar si nuestra política monetaria está muy alejada de las prácticas y dilemas de otros bancos centrales.
No solo en Corea del Sur sino en varios países asiáticos se han elevado las tasas de interés en meses recientes como una medida para moderar la inflación que, en todos los casos, se ha adoptado con reticencia en virtud de que simultáneamente se teme que se produzca una recesión económica. El alza en la tasa de interés coreana fue la primera en más de un año y, según el comunicado de prensa emitido al efecto, la necesidad de mitigar las expectativas inflacionarias fue una de las principales razones para tal decisión. Dicho comunicado reconoce que la actividad económica está débil; el hecho de que, no obstante ello, las autoridades monetarias coreanas hayan optado por subir la tasa de interés sugiere cuán similar es la situación de Corea a la de otros países asiáticos y, valga decirlo, a la de Guatemala, donde se han elevado las tasas de política a pesar de que las preocupaciones respecto de un menor crecimiento se han intensificado.
El dilema del Banco de Corea se revela en la información reciente que muestra una compleja situación en la que se mezclan un alza abrupta del nivel de precios, un deterioro en la confianza de los consumidores y una desaceleración del PIB. La inflación surcoreana fue 5.9% en julio, tasa que aunque a primera vista pueda parecer aceptable, es no solo la más alta en los últimos diez años, sino que desde el año pasado permanece por encima de la meta de 3.5%. Los problemas inflacionarios en Corea del Sur se han visto exacerbados por los precios del petróleo y sus derivados, respecto de los cuales la economía coreana es muy dependiente. Esta situación orilló al Banco de Corea a restringir su política monetaria, pese a haber sido más reacio que sus vecinos a hacerlo, poco tiempo después de haber adoptado medidas para fortalecer su moneda, con vistas a que un won más fuerte abaratará el precio de las importaciones.
La decisión de subir la tasa de interés entraña riesgos, pues a una economía en desaceleración no la ayuda un encarecimiento del crédito. Sin embargo, el banco central surcoreano habrá estimado que el crecimiento del PIB de 4.8% que esperan para 2008, aunque mucho menor que el del año previo, aún da espacio para una restricción monetaria. Cualquier semejanza con la realidad guatemalteca no es mera coincidencia, sino que demuestra cuán parecidas son las prácticas, herramientas y dilemas de los bancos centrales en el mundo. En todo caso si, como han opinado algunos analistas, el Banco de Guatemala parece estar descaminado, no lo está más que la mayoría de bancos centrales en estos tiempos turbulentos.
La inflación surcoreana fue 5.9% en julio, tasa que permanece por encima de la meta de 3.5%